jueves, 14 de octubre de 2010

Una llamada ¿perdida?


Creo que es bastante conocida mi fobia al teléfono. No exagero si hablo de una fobia porque he tenido (y me temo que sigo teniendo) todos los síntomas: http://www.fobias.net/Telefonofobia.html

He mejorado notablemente, ahora ya hasta me atrevo a descolgar (bueno, ya no se descuelga, se da a un botoncito) pero en alguna época que prefiero no recordar no era capaz siquiera de realizar ese gesto, me quedaba paralizada cuando sonaba . Confieso que sigue sin gustarme que suene, me pone nerviosa , siento algo parecido al miedo. Mi primera reacción siempre es desagradable, independientemente de quién me llame y a pesar de haberme puesto ahora como tono de llamada una canción de Amelie que me encanta. Yo quiero motivarme de alguna manera y sé que sólo enfrentándome lo “superaré” pero... (Agradezco vuestra paciencia).

Sin embargo, a veces, no sé muy bien por qué, la magia existe y entonces me noto habladora, animada, sin ganas persistentes de que se acabe la conversación. Eso me pasó anoche. El azar, que según Serrat es caprichoso, quiso que “sin querer” mi teléfono táctil, que tiene vida propia, llamara a mi AMIGA la CHURRUPITA y le dejara una llamada perdida que ella amablemente recogió y devolvió.
Ahora que lo pienso mejor…¿ perdida? Noooo, perdida no estaba esa llamada, sabía premeditadamente lo que hacía y lo importante que era la destinaria. Sabía que en realidad yo quería saber cómo estaba, que pienso en ella a menudo, que ha sido clave en momentos clave, que echo de menos tenerla más cerca, formar parte de su cotidianidad, llamarle pija, bromear con su achuchable maridito…y reírme con ella. Con pocas personas me río tanto y tan desde dentro. Algo bonito me tenía que reservar mi etapa gallega.

Gracias por encontrar siempre mi llamada.

2 comentarios:

  1. Son esas extrañas conexiones que nos mantienen unidas a pesar de que nos separan unos cientos de km. Con las buenas amigas pasa esto, tengo esa sensación de que no pasa el tiempo aunque lleve sin saber de ti, un mes dos meses. Ahora con las nuevas tecnologías, llámese facebook, blog ya no ocurre, y cuando tengo un hueco me escapo y te escucho, te leo y me sorprendo riendo recordando detalles, preguntándome si con ese nerviosismo que tenías cuando sonaba el teléfono te daría esa sonrisa tonta que te daba cuando te ponías nerviosa. Tú también formas parte de lo más bonito de mi vida y ojalá tú también estuvieses mas cerca, aunque estando tan lejos te siento aquí a mi lado. Un beso

    ResponderEliminar
  2. Oye, qué guapa te pones a veces. Me ha dado la sonrisa tonta al leerte pero no por nerviosa sino por emocionada.
    Un abrazo.

    ResponderEliminar