viernes, 13 de febrero de 2015

Mi pueblo

Ahora sí que sí. Esta vez es la definitiva. Esta terapia intensiva, de choque, es la última prueba que voy a tener que pasar para, definitivamente, reconciliarme con mi pasado. 
No tardaron mucho en llamarme de la Consejería. Ese número tan esperado apareció en la pantalla de mi móvil el 19 de enero. ¡La de sensaciones y pensamientos que pude tener antes de responder! Al día siguiente me tenía que incorporar para hacer una sustitución en el pueblo que me vio nacer, crecer y sobrevivir. A ese pueblo al que tanto me ha costado volver, del que he huido durante años a pesar de estar a 50 km o así de donde vivo. Poco a poco en estos últimos años he ido volviendo, ha sido algo progresivo y, aunque he ido superando la ansiedad de las primeras veces, aún de vez en cuando al entrar o salir del pueblo notaba que me mareaba (y no era por el coche)... Aun así, no quise seguir huyendo y hemos ido bastante a pasar el día con mi sobrina y mi casi nieta. Las niñas disfrutan mucho juntas y a mí empezó a gustarme ver a mis hijas jugar en los mismos lugares en los que transcurrieron etapas tan importantes de mi vida. 
Pues bien, allí estoy. Ahora paso las mañanas en mi pueblo, aprendo en mi pueblo, me estreso en mi pueblo, trabajo sin descanso en mi pueblo, me motivo en mi pueblo, me reencuentro con compañeras del cole que son madres de mis actuales alumnos, .... "¿Tú eres aquella rubia que tocaba en la tuna?" "Te recuerdo perfectamente jugando en la plaza". Y yo mientras pensando: "No, por favor, tampoco hace falta que te acuerdes con todos los detalles" Pero voy saliendo del paso y, salvo que no me resulta especialmente cómodo dar consejos a alguien que me ha conocido en contextos totalmente diferentes al actual, soy capaz de decir sin titubear: "Sí, soy yo".
Porque sí, soy YO, con todo mi pasado a cuestas, con el pedazo de presente que me he ganado a pulso y con un futuro completamente esperanzador; lleno de trabajo, de incertidumbres, de legislación, de oposiciones, de plazas, de vacantes, de ruletas....pero siempre mejor que lo que he dejado.