He empezado a trabajar con una
niña de 21 meses, que fue prematura, de parto gemelar. Es sorda profunda,
acaban de hacerle un implante coclear ( http://es.wikipedia.org/wiki/Implante_coclear) y está empezando a “oír” por primera vez
el mundo. A mí, entre otras cosas, me
toca enseñarle a dar un poco de sentido a eso que oye y a estimular al máximo
su comunicación. Tiene también problemas de movilidad, que afectan a un
hemicuerpo, pero los va compensando... Es todo un reto laboral , me obliga a
ponerme al día, a buscar información, a aprender gestos, a “orientar” a una
madre que está ya más que macro autorientada. No sé quién me gusta más si la
niña, con esa mirada penetrante, esas pestañas interminables y esas ganas de
aprender infinitas..o esa madre coraje, que no se queja jamás de su suerte, que
observa cada detalle de su niña, que investiga, pregunta, discurre, juega,
abraza...y sonríe sin parar, sin tregua. Me encanta. Quiero ser así de maja y
de fuerte. Quiero transmitir ese derroche de energía y positividad.
Me gusta cruzarme por la vida con
personas admirables. Me gusta seguir aprendiendo.
....y a mí también me gustaría
que, de vez en cuando, alguien me enseñara a “dar sentido a lo que escucho”. Me
cuesta entender este mundo.
No hay comentarios:
Publicar un comentario