martes, 11 de octubre de 2011

Falacia de recompensa divina



Estoy trabajando en sesión con un chico las distorsiones cognitivas. Me sirve al mismo tiempo para ser consciente de las mías. Una de las más “graciosas” es la “falacia de recompensa divina” (*)


En eso ando yo, esperando que me toque la Primitiva, vengan tiempos mejores y entonces TODO, TODO, TODO, cambie a mejor: no tendremos que limpiar, ni planchar, ni cocinar, ni ir a la compra..., no estaremos tan cansados, al no estar agotados tendremos más paciencia, al tener más paciencia las niñas recibirán más alabanzas y menos riñas y entonces tendrán la autoestima por el cielo y su comportamiento será impecable: siempre sonrientes y tranquilas, con vocecita dulce, obedientes, cuidadosas.... Los fines de semana sólo nos dedicaremos a disfrutar de la vida: levantarse, desayunar, ducharse, vestirse y....¡¡ a vivir!! Al estar todo limpio no habrá tanto polvo y ELLA y ELLITA no volverán a tener crisis asmáticas porque seguro que el origen es alergia a los ácaros.... ÉL y YO podremos echar la siesta o escuchar a Manolo García y “Los días intactos” tomándonos una cerveza con limón, mientras los angelitos juegan sin hacer ruido en el jardín, cual dos princesitas de cuento...Y no me dolerá más la espalda y tendré un monitor guapo de Pilates que vendrá al gimnasio de casa a hacer los ejercicios, jajaja. Y....


Por cierto, mañana es fiesta y aún no he echado la Primitiva para el jueves. SOS, que no se me olvide. Está en juego el futuro de mi familia. Nos espera un "giro teatral" http://www.youtube.com/watch?v=jm7WYsaCgT0


(*) [...]Supone la tendencia a esperar que los problemas mejoren mágicamente en el futuro, sin buscar uno mismo soluciones personales. Los sueños donde los problemas se resuelven de manera mágica o por intervención de instancias superiores y poderosas, pueden relacionarse con esta distorsión.

No hay comentarios:

Publicar un comentario